
La inapetencia en los niños es quizás una de las consultas más frecuentes en pediatría luego de los 16 meses de vida. Ningún medicamento es selectivo para que coma frutas, verduras o algún tipo de carne, como muchos pueden pensar. El tema es netamente conductual y si respetamos estos pasos, que a continuación les explico, posiblemente evitarás que esto suceda.
Crea necesidades, deja que le dé hambre, y no le des gusto en todo lo que quiere comer; no tienes que desgastarte obligándolo a comer. El hambre hará su trabajo de la mejor manera, si tú le ayudas a que lo haga no reemplazando por alimentos de su agrado y que le quitarán el hambre de una manera simple, pero en la mayoría de veces NO nutritiva.
Para crear un hábito alimentario adecuado en tu hijo, sigue de manera juiciosa y dedicada estos 4 pasos y en una a dos semanas estarás viendo los resultados.
PASO 1: TIEMPO. Debes crear una rutina de horarios para cada alimento principal y las media mañana y media tarde. Le vas a suministrar el desayuno, almuerzo y la comida a la misma hora siempre, independiente del día.
PASO 2: ESPACIO. El desayuno, almuerzo y comida se deben tomar en el comedor y no montado en un triciclo, o jugando en su cuarto o patio de la casa y ustedes corriendo detrás con el plato y la cuchara. Debe tener un espacio en la mesa del comedor destinada para ellos y ahí comer sus alimentos. Para los entremés, puede ser en un lugar que sea cómodo para ellos como son el parque, habitación o jugando, pues en general estos alimentos son de su agrado y son en pequeñas cantidades por lo que se lo comen más fácil y rápido.
PASO 3: ALIMENTO. Desde antes del año de vida, tu hijo se debe incorporar a la dieta de la familia y debe comer lo que todos comen en casa en su día a día; no lo lleves siempre a zona de confort, pues así ellos son quienes te están educando en la forma de alimentarlos y no ustedes a ellos.
PASO 4: FIRMEZA Y PACIENCIA. Los niños utilizan el llanto y la pataleta para que les demos lo que para ellos es rico, aquí es donde tú debes ser más firme y paciente con su respuesta. De lo juiciosos que sean en este último punto, será el éxito de tu estrategia. Verás que sí puede comer y lo que tú le sirvas.