
Ser la mamá de un prematuro puede ser una de las experiencias más difíciles que cualquier persona pueda experimentar, pero a la vez es un momento que te llena de valentía, superación y sobre todo mucho amor.
Todas las madres tendemos a idealizar la maternidad, por eso el encontrarnos en una situación difícil, con nuestro bebé hospitalizado y con algunas pruebas por superar puede ser un choque muy grande. Cómo médica nutrióloga y además mamá de una bebé prematura mi mayor consejo es vivir cada día a la vez y superar cada prueba que se les ponga por encima, unos días será infección, otras veces la respiración, otros el peso; pero con tranquilidad y mucho amor irán superando cada una de ellas.
Hoy quiero hablarles de la leche materna y el beneficio de ésta para el bebé prematuro, este líquido mágico, en estos momentos tan críticos. La leche materna no solamente es nutrición, sino también tratamiento. Tu cuerpo sabe que tu hijo nació antes de tiempo, por lo cual prepara una leche especial para él, que disminuye el riesgo de infecciones, incidencia de enterocolitis necrotizante, enfermedad pulmonar crónica, sepsis (infección severa generalizada) de inicio tardío, retinopatía del prematuro (alteraciones en los ojos que dificultan la visión), enfermedades atópicas (rinitis, dermatitis, bronquitis y asma) cuando hay antecedentes, etc.
La lactancia materna acompañada de un plan canguro (permanecer piel con piel la mayor parte del tiempo posible), hará que tu bebé esté más estable, tranquilo, controle mejor su temperatura, su respiración, sus movimientos gastrointestinales y gane más rápidamente peso.
Por todo esto es fundamental que su alimento sea la leche materna y recuerda que cada gota cuenta.
¿Cómo lograrlo?
- Extracción manual del calostro (la primera leche de tu bebé sale durante los primeros 3 días)
- Realizar siempre masaje previo y estimulación
- Realizar la extracción idealmente una hora después del nacimiento y hacerla cada 2 horas incluidas extracciones nocturnas.
- Durante los primeros dos días idealmente, realizar extracción manual y luego iniciar con extractor doble eléctrico
- Realizar extracciones justo después de hacer canguro (eso ayudará mucho a la salida de la leche)
- Extraerte cada vez que tu bebé esté comiendo ( cada hora, cada 2 o 3 ).
Si notas que tu producción no es suficiente asesorate de un experto, pregunta por el método de extracción poderosa y la necesidad de galactogogos (medicamentos que ayudan a aumentar la producción de leche).
Cada gota cuenta y así al principio no estes con lactancia materna exclusiva, más adelante lo podrás lograr…
Por: Diana Sanín.
Nutrióloga Infantil, asesora en lactancia materna